martes, 15 de mayo de 2012

Let's take a break!

Todo traductor que se precie (o no) sabe que su jornada laboral transcurre, la mayor parte del tiempo, sentado delante de un ordenador. Y toda persona que se pasa delante de una pantalla durante un tiempo prolongado sabe que esto no es saludable. Por esta razón, me he tomado la licencia de "desconectar" de tanto programa informático con relación a la traducción y hablar de otro programa informático que sirve para descansar de los anteriores (aunque suene un poco contradictorio): workrave.



Me topé con esta ovejita tan mona hace un par de días, cuando me dio por investigar diversos artículos de La linterna del traductor. En esta publicación, encontré un artículo que hable precisamente sobre el gran descubrimiento de este programa.

Se trata de un software libre que ayuda a las personas que trabajan con ordenador a planificar sus descansos y así asegurarse de seguir gozando de plena salud. Workrave dispone de un sencillo menú de preferencias en el que podemos establecer el tiempo que queremos tener entre pausas y la duración de las mismas. Además, diferencia entre dos tipos de pausas: las micro pausas, que duran apenas un minuto y que sirven para descansar la vista apartando la mirada de la pantalla; y las pausas, que son más largas y están destinadas a realizar algunos ejercicios. Además, el programa permite también seleccionar el número máximo de horas que queremos trabajar y con el que pondremos fin a nuestra jornada laboral.

En las pausas, el programa nos ofrece elegir entre diez ejercicios que nos servirán para descansar la vista de tenerla pegada a la pantalla...




...o para estirar los músculos.



Con este programa, también podremos ver unas estadísticas que nos muestran el tiempo total que hemos trabajado y/o descansado y si hemos hecho (o no) los ejercicios propuestos.
¿Y qué pasa si la pausa me interrumpe en un momento crucial para mi trabajo? ¡Ningún problema! Estos descansos se pueden posponer de manera que uno puede seguir con su tarea hasta que considere oportuno.

Por último, y mencionando el artículo en el que leí sobre este programa, cabe destacar que, en los créditos finales, se puede encontrar una relación de los emails de todas las personas que participaron en la traducción de la interfaz a diferentes idiomas... ¡un hurra por el reconocimiento de nuestro trabajo!

Esta entrada está basada en el artículo Workrave, el programa de la ovejita redactado por María Barbero y publicado en La linterna del traductor.
Página web del programa: http://www.workrave.org/



OpenProj

Últimamente, la cosa va de concretizar y hoy no será para menos. Ya hace tiempo que comenté en qué consistía la gestión de proyectos, una tarea un tanto "antipática" debido a todos los aspectos que se deben tener en cuenta. Pues en este momento intentaremos hacer que esa "antipatía" se suavice un poco de la mano de un programa de gestión de proyectos: OpenProj.

OpenProj es un software libre que nos permite, de forma rápida y sencilla, establecer los pasos y la cronología del proyecto que tenemos entre manos. Por un lado, tenemos un calendario en el que se puede especificar el día de comienzo del proyecto, los días laborables, el número de horas que se desea trabajar... Por otro lado, podemos hacer una división de tareas y asignar a cada una de ellas las opciones citadas anteriormente.

Una de las ventajas de este programa es que usa diagramas de Gantt, con los que es muy sencillo ver, en una sola ojeada, el proyecto total con todas las divisiones y el tiempo estimado para cada una. A continuación, muestro la vista general de un proyecto (aún en blanco) con cada una de las partes:

Como ejemplo de gestión de proyectos con este programa, describiré grosso modo los pasos que seguimos en la asignatura de Informática aplicada a la Traducción.
En primer lugar, dentro de nuestro proyecto tenemos que dividir las tareas y sub-tareas para poder especificar después los recursos y duración que les atribuiremos. Nuestras tareas eran:

Proyecto global - Análisis del proyecto:
        - Documentación: traducción, corrección, revisión, revisión cliente, inserción de comentarios, capturas de pantalla, DTP y control de calidad.
         - Ayuda: traducción, corrección, revisión, revisión cliente, inserción de comentarios y capturas de pantalla.
Entrega del proyecto


A continuación, establecemos el tiempo que nos llevará cada una de las tareas teniendo en cuenta los días a la semana que queremos trabajar y el número de horas por día. El siguiente paso es atribuir a cada tarea la fecha de comienzo, pues para ahorra tiempo se pueden realizar de forma simultánea varias tareas. Así, podremos especificar en el programa que, por ejemplo, el tercer día de la tarea de traducción se puede empezar también con la tarea de revisión, superponiendo de esta forma varios procesos. Por último, y como resultado, obtenemos un cuadro como el que muestro a continuación con la tabla y los gráficos de nuestro proyecto:


Por último, me gustaría comentar que este programa tiene otras muchas funciones que no hemos utilizado ni he detallado en esta entrada, pero que también son interesantes a la hora de realizar un proyecto profesional en el que se tenga que controlar todos los aspectos de un trabajo global. Estas funciones son, entre otras, el detallar la definición del proyecto, el presupuesto o el cumplimiento (o no) de los plazos estimados.

domingo, 13 de mayo de 2012

DéjàVu X2

Si en una entrada anterior hablábamos de memorias de traducción en general, en este momento vamos a centrarnos en un programa concreto: DéjàVu X2. La elección de este programa se basa, simplemente, en que es la única herramienta de traducción a la que he tenido acceso.

En primer lugar, el traductor debe crear un proyecto en el que cargará el texto que debe traducir. En este proceso, el programa ofrece la recuperación de archivos de memoria de traducción y glosarios. Es una peculiaridad de esta versión del programa el permitir cargar, en un mismo proyecto, hasta 5 memorias y 5 glosarios independientes. Esto supone una gran ventaja para el traductor, pues dispone de una amplia referencia y consulta para que el nuevo proyecto tenga la más alta calidad posible; así, podemos cargar, por ejemplo, una memoria relativa a un ámbito de especialidad, otra relativa al cliente que nos ha remitido el encargo y otra de referencia con diferentes bancos de datos.

Esta versión también dispone de más novedades, entre las que se pueden destacar las siguientes:
  • El recuento de palabras y repeticiones ofrece más posibilidades: por ejemplo, se puede usar el sistema de análisis de Microsoft Word y analizar los textos cruzando proyectos para sacar el máximo provecho de las repeticiones que se den entre varios proyectos o archivos de memoria.
  • Alineación múltiple: se pueden alinear varios pares de archivos en un solo paso y alimentar de esta forma diferentes memorias, tanto propias como de los clientes.
  • DeepMiner: es un motor de búsqueda de memorias y glosarios.
  • AutoWrite: un sistema de escritura automática que nos muestra palabras o grupos de palabras que DeepMiner extrae de las traducciones anteriores.


Además, me gustaría señalar que este programa se puede definir como un sistema híbrido de los que hablábamos en la entrada sobre Memorias de Traducción. ¿Y por qué? Pues porque esta última versión incorpora la opción de usar el sistema de traducción automática de Google Translate.

Por último, una de las ventajas que ofrece este programa es la amplia gama de compatibilidades, ya que trabaja con cualquier archivo de texto (Office, PageMarker, QuarkXpress, InDesign, HTML…) y con los formatos de otros programas de traducción asistida (sdlx, ttx, xliff…). Además, esta nueva versión es totalmente compatible con su antecesora, no requiere de ninguna conversión y nos permite utilizar los mismos archivos (proyecto, memoria y glosario) en ambas versiones sin conflictos de ningún tipo.

sábado, 12 de mayo de 2012

Alineación


En la entrada anterior mencionábamos la alineación al hablar de las memorias de traducción, pero... ¿qué es la alineación? La alineación puede definirse como la comparación de un texto origen y su traducción haciendo coincidir los segmentos correspondientes y uniéndolos como unidades de traducción. Existen muchos programas de alineación de traducciones, entre los que podemos citar Bitext2TMX, DéjàVu y WinAlign. 

Por lo general, existen determinados pasos que comparten todos los programas de alineación, si bien hay que tener en cuenta las peculiaridades de cada uno y sus funciones y botones. En primer lugar, hay que analizar el texto origen y su traducción para comprobar que son adecuados y tienen el mismo formato de archivo. Después, hay que especificar el formato de entrada y las lenguas origen y meta. A continuación, se seleccionan los archivos correspondientes siguiendo las instrucciones de cada herramienta de alienación. Por último, se debe exportar el resultado de la alineación en un formato compatible con el programa de memoria de traducción que queramos utilizar.


Herramienta de alineación de DéjàVu



Herramienta de alineación de WinAlign



Herramienta de alineación de Bitext2TMX

Por lo general, y según mi experiencia personal, estas herramientas de alineación son muy fáciles de usar. El único problemilla que surge es que, como cualquier programa informático, no es infalible. Siempre necesita la ayuda del traductor para especificar los segmentos, teniendo éste que unir, dividir o incluso eliminar algunos de ellos.

P.D. Me gustaría hacer referencia a mi compañera Paula, que, en la entrada redactada en su blog sobre alineación hizo mención de una página web a la que casi todo estudiante de traducción recurre, Linguee, y que ofrece sus servicios en forma de alineación.


sábado, 21 de abril de 2012

Memorias de Traducción

Después de haber explicado en qué consiste la Traducción Automática, nos resultará más fácil entender qué son las Memorias de Traducción, pues ambas son sistemas automáticos de traducción. No obstante, existe una diferencia fundamental entres estos dos sistemas: la primera utiliza lenguaje de conocimiento para traducir un texto de una lengua origen a una lengua meta; la segunda utiliza traducciones ya creadas por el traductor que se han ido almacenando en el programa. 
Como el propio nombre indica, una memoria de traducción empieza a funcionar una vez se hayan almacenado datos, pues es imposible "recordar" datos que no se hayan "memorizado". Para comenzar nuestra memoria, debemos introducir textos originales alineados con sus respectivas traducciones (el concepto de alineación lo describiremos en la próxima entrada).
Para crear una memoria de traducción hay que seguir unos pasos que, por norma general, son similares en todos los programas: selección de idiomas, gestión de archivos, configuración del usuario y opciones para coincidencias parciales.

  • Selección de idioma: una memoria de traducción tiene, al menos, dos idiomas, la lengua origen y la lengua meta. Sin embargo, la mayoría de los programas admiten todos los idiomas e, incluso, diferencian entre variedades regionales.
Selección de idioma en DéjàVu
  • Gestión de archivos: la memoria de traducción puede estar formada tanto por un sólo archivo como por varios archivos en diferentes formatos.
  • Configuración del usuario: se trata de la información adicional sobre la base de datos o sobre las unidades de traducción. Esto permite utilizar filtros relacionados con el tema de la traducción o su cliente, por lo que la terminología y el estilo puede adecuarse más al encargo que se nos ha solicitado.


Configuración del usuario en DéjàVu
  • Opciones para coincidencias parciales: por cada memoria de traducción que se crea, se puede fijar el límite de coincidencia sobre el que se desea trabajar. Normalmente, se puede configurar este límite entre  el 1% y el 99%. No obstante, con el fin de evitar mucho "ruido" o demasiado "silencio", este umbral se suele definir entre el 60% y el 70%.
Opciones para coincidencias en DéjàVu
Las memorias de traducción tienen grandes ventajas, sobre todo en textos afines tales como instrucciones, pues las diferencias entre textos son muy reducidas y la memoria ofrecerá una calidad de traducción muy alta.

Existe un gran variedad de programas de memoria de traducción, tanto de pago como software libre. Algunos ejemplos son: Trados, OmegaT o DéjàVu.

Antes de finalizar la entrada, cabe destacar que existen unos sistemas híbridos entre la traducción automática y la memoria de traducción, los cuales usan las memorias siempre y cuando estén disponibles y, en caso contrario, echan mano de un traductor automático.

miércoles, 11 de abril de 2012

Traducción Automática

La traducción automática se podría definir como los sistemas informáticos que traducen un texto de una lengua origen a una lengua meta con o sin ayuda de la intervención humana. Teóricamente, esos programas informáticos deberían respetar 3 normas principales: traducir todo lo que dice el original, no añadir nada que no esté en el texto fuente y usar la lengua meta de la forma más correcta y natural posible.

El término "traducción automática" engloba dos tipos de traducciones: por un lado, la que es llevada a cabo sin la intervención humana de principio a fin, llamada "traducción automática de alta calidad"; por otro lado, está la "traducción automática con participación humana", en la que el ser humano interviene en cualquiera de las fases de la traducción. Esta intervención humana se puede clasificar en tres etapas: interacción, preedición y postedición.

Como con cualquier otro tema, es importante acudir a las raíces para estudiar y entender con profundidad el alcance y la importancia  de la cuestión, por lo que vamos a analizar de manera sencilla los inicios de la traducción automática. A finales de la década de 1950 se empezó a desarrollar este estudio, sin embargo, los pocos resultados obtenidos a corto plazo llevaron al cese de financiación orientado al desarrollo de estos sistemas informáticos.

Warren Weaver, en 1949, reveló en el llamado "Memorandum Weaver" la idea de traducción automática sugiriendo cuatro métodos: análisis estadísticos, exploración de la lógica subyacente, técnicas criptográficas del periodo de guerras y las características universales del lenguaje. A raíz de esto, se empezaron a desarrollar proyectos de traducción automática en Estados Unidos. A partit 1951, Yehoshua Bar-Hillel, nombrado como primer investigador, se dedicó exclusivamente a esta aplicación. En la década de 1960, la TA se basó en métodos empíricos de tanteo y en la década de 1970, los proyectos más importante se trasladaron a Canadá.


Desde que empezó a desarrollarse la traducción automática, se han creado numerosos programas (algunos de los cuales estudiaremos más adelante). Éstos se pueden dividir atendiendo a diferentes características:
- Número de lenguas: se dividen en bilingües, de una lengua origen se traduce a una sola lengua meta; y multilingües, de una lengua origen a varias lenguas meta.
- Dirección de la traducción: los programas pueden ser unidireccionales, si traducen sólo en una dirección (por ejemplo, de inglés a español); o bidireccionales, si traducen en ambas direcciones (por ejemplo, de inglés a español y de español a inglés).
-Enfoque: se pueden distinguir tres enfoques, cada uno de ellos relacionado estrechamente con una de las 3 etapas fundamentales en el desarrollo de estos sistemas informáticos.
         1. Sistemas de traducción directa: correspondientes a la primera etapa. Básicamente son grandes              diccionarios que traducen palabra por palabra, por lo que la calidad final de la traducción no es muy alta.
       2. Sistemas de transferencia: correspondientes a las segunda etapa. Además de ser grandes diccionarios monolingües y bilingües, tienen un amplio conocimiento sintáctico-semántico de las lenguas. Esto quiere decir que, en vez de traducir simplemente las palabras, es capaz de reconocer el contexto que rodea a ésta para decidir qué significado darle. También reconoce las estructuras sintácticas, con lo que puede modificar el orden de las palabras de una misma frase para reordenarlas de la forma más adecuada.
             3. Sistemas interlingua: correspondientes a la tercera etapa de la traducción automática. Es un caso particular de los sistemas anteriores en los que se realiza un análisis mucho más profundo de cada frase.

Después de este análisis de la traducción automática, cabe añadir que, si bien es una gran ayuda para el traductor, todos estos programas requieren de la maño del hombre para que la calidad de la traducción sea más que aceptable. Esto es así puesto que las lenguas no son sistemas cerrados y completamente programados, sino que existen aspectos que relacionan la lengua con el mundo real que los ordenadores no pueden advertir (anáforas, actos de habla...). 

Esta entrada es resumen del artículo Posibilidades y realidades de la Traducción Automática, redactado por Victoria López y publicado en La Linterna del Traductor.


lunes, 19 de marzo de 2012

Gestión de Proyectos de Traducción

La gestión de proyectos me parece un tema muy interesante de comentar, aunque puede que es sí misma no lo sea tanto... Se trata de una labor muy ardua y que requiere gran concentración y paciencia. 

Imaginemos un encargo de traducción de gran volumen, con muchas tareas que desarrollar (traducción, revisión, corrección, maquetación...) y, como no, ¡que tiene que estar listo en un tiempo récord! Pues bien, aquí nos encontramos ante la necesidad de planificar una serie de aspectos que hagan posible una resolución  satisfactoria de dicho encargo. Para ello, existe la figura del gestor de proyectos (que puede o no ser el mismo traductor que recibe el encargo). Este gestor debe analizar los requisitos del proyecto para poder diseñar un planning en el que se especifique la división de tareas, el tipo de profesionales que formarán parte del proyecto y el número de cada uno de ellos que se necesitará para conseguir tener el producto a tiempo. Una vez que se han decidido todo estos aspectos, es recomendable realizar una tabla con el número de horas que debe trabajar cada profesional y las fechas de inicio y fin de su labor con el objetivo de tenerlos todo controlado.

Existen muchos programas informáticos que facilitan esta labor de gestión de proyectos, incluso dentro del mismo campo de la traducción. Personalmente, durante mi estancia erasmus en Alemania, tuve la oportunidad de conocer a fondo uno de ellos: Across. Este programa permite organizar tareas, traducir, revisar, corregir, mantener contacto con todos los profesionales que forman parte del proyecto,... 


En resumen, me pareció de gran interés puesto que simplifica en una sola pantalla el estado general y de cada una de las partes del proyecto, haciendo más fácil para el gestor la agobiante tarea de organizar todo. No olvidemos de que esta persona es la que debe dar la cara ante el cliente y mantenerse en contacto con todos los integrantes del proyecto, responsabilizándose de cualquier imprevisto que pueda surgir. En definitiva, creo que hay que tener madera para ponerse al frente de cualquier gestión de proyectos, pues se trata de un puzzle muy difícil de encajar.